15 medidas para cuidar el planeta en
familia:
Comprar sólo lo necesario
y no dejarse influir por modas o publicidades agresivas.
Utilizar productos
reutilizables: servilletas y pañuelos de tela, vajilla de
cristal o cerámica, etc. Es preferible usar fiambreras de cristal y
evitar el uso del papel de aluminio o film plástico alimentario.
Utilizar productos reciclados y
reciclables. Se
ahorra
agua y otros recursos y disminuye la contaminación. Para
fabricar una tonelada de papel virgen se necesitan 115.000 litros de
agua; en el caso del papel reciclado 16.000 litros, es decir, un 89%
menos.
Antes de tirar cualquier objeto
piensa si se puede aprovechar. Los juguetes, ropa usada o los
libros pueden ser de utilidad a personas necesitadas.
Separar los residuos en casa
para facilitar el reciclaje y utilizar los puntos limpios de tu
municipio para depositar aceites, baterías de coche, fluorescentes,
restos de pinturas, radiografías, residuos informáticos, etc.
Consumir frutas y verduras de
temporada, producidas de manera ecológica y local. Así se
evita el fomento de producciones horto-frutículas intensivas que
demandan grandes cantidades de agua y utilizan fertilizantes y
pesticidas que contaminan el agua.
No descongelar los alimentos
bajo el grifo. Es mucho más ecológico sacarlos del congelador
el día anterior y colocarlos en la nevera.
Elegir productos de limpieza
sin cloro y evitar detergentes con fosfatos y tensoactivos químicos.
Utilizar bombillas ecológicas:
las bombillas fluorescentes compactas consumen sólo el 20% de
energía que las tradicionales y duran ocho veces más.
Apagar las luces y los
electrodomésticos cuando no se usen. Recuerda que tener los
aparatos en stand by (con el piloto rojo encendido) también consume
energía.
Reducir
el consumo de pilas. Además de contener sustancias tóxicas
son poco eficientes y derrochan energía.
Cerrar los grifos cuando no se
necesite el agua y controlar que no haya en la casa ningún grifo
que gotee. Una gota por segundo supone 30 litros de agua al día.
La ducha, mejor que el baño.
En un baño se pueden gastar 100 litros de agua; cuando nos duchamos
usamos solo unos 30 litros de agua.
No tirar por los desagües nada
que no sea agua. Los restos orgánicos, como los aceites y otros
residuos, contaminan nuestros ríos y dificultan el trabajo de las
depuradoras.
- Si laváis el coche en casa, hacedlo con un cubo y no con
la manguera. Lavar el coche con un cubo de agua consume 60
litros de agua, frente a los 500 que supone lavarlo con manguera.
¿Por qué es importante separar
bien los residuos?
Separar bien los residuos nos permitirá acertar en qué
contenedor van, para que luego se puedan reciclar. Porque, si nos
equivocamos de contenedor o mezclamos varios tipos de materiales, el
objeto depositado no tiene otro fin que el vertedero. No van a la
planta de
reciclaje
correspondiente, lo descartan. Por lo que, no solo no se recicla,
sino que supone el doble de trabajo y gasto económico.
¿Sabes
cómo separar?
Por colores:
Contenedor verde: Está destinado
a envases de vidrio, siempre sin tapas de metal o de corcho y
debe ser vidrio que no tenga restos orgánicos.
Contendor amarillo: Debemos
depositar los envases de plástico, metálicos y tipo brick.
- Contenedor azul: Es para papel y cartón que no estén
sucios.
Antonio Abolafio Alvarez, 5º D
0 comentarios:
Publicar un comentario